
¿Cuál es su análisis general y juicio acerca de Medio Oriente, de
La tercera invasión de Líbano surgió a partir del secuestro de los soldados israelíes pero, en su momento, esa fue una acción solidaria de Hezbollah con los palestinos, que se enfrentaban a una terrible persecución. Gaza es una prisión gigante. La situación económica en las áreas de Palestina no tiene precedentes. Nunca en la historia, aún regresando a los años
Sin embargo, esta es la primera vez desde la formación del estado de Israel en que la clase dominante israelí y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se han enfrentado a una derrota tan clara en el campo de batalla. El FDI solo penetró un par de millas en Líbano. Fue confrontado por una decidida resistencia y no fue capaz de de vencer a Hezbollah, implicando una derrota para la clase dominante de Israel en general. También derrotó al imperialismo norteamericano y sus políticas en relación al Líbano porque ellos habían iniciado una serie de acciones ofensivas hasta la invasión, incluyendo la expulsión de Siria del Líbano. Fue también un paso hacía mas ataques a Siria. También hubo especulación de que la guerra en Líbano era una preparación para un futuro ataque contra Irán, aunque ese es un asunto diferente. Apoyamos el retiro de las tropas del Líbano. El pueblo del Líbano tiene derecho a decidir su propio destino.
Las consecuencias de
Miembros del Partido comunista de Líbano, por ejemplo, y otros de la izquierda cuya influencia independiente ha decaído apoyaron a Hezbollah como una organización de resistencia. Ha habido incluso declaraciones favorables recientemente de Nasrullah, el líder de Hezbollah, acerca del papel del Che Guevara, del socialismo, en el combate al imperialismo. Así que no es una típica organización islámica. De hecho, ha sido forzada a abandonar la idea de un estado islámico en Líbano como resultado de la presión y apoyo que ha recibido por grupos diferentes a los Shias, como los Sunnis, cristianos y otros.
En el curso de
Hemos tomado posiciones generales sobre
¿Mantendrá la paz
Hezbollah
La segunda pregunta es que dice que apoya el derecho de Hezbollah y la población libanesa para resistir pero criticas el uso de misiles Katyusha en contra de los pueblos de Israel. Algunas personas dirán que ante la diferencia en las fuerzas en esta guerra, Hezbollah usó lo que le fue posible – ¿Tenían misiles muy inteligentes para atacar edificios gubernamentales y no pueblos de Israel? ¿Cómo podemos decidir sobre tácticas militares de organizaciones que concretamente defienden a sus propios conciudadanos en El Líbano?
En primer lugar, tenemos que aclarar que Hezbollah como cualquier otra fuerza de resistencia nacional tiene el derecho de resistir la intervención militar de Israel, eso no hay ni que decirlo. Tiene el derecho de confrontar al FDI, de usar misiles para atacar blancos militares israelíes y derribar aeroplanos. Eso es una parte legítima de la resistencia militar. Hezbollah y la resistencia libanesa en una guerra tienen también el derecho de atacar blancos militares específicos dentro de Israel.
En lo que a tácticas militares se refiere, hubo errores en los dos lados, que recayeron sobre ellos. Después del secuestro de las tropas israelíes, el gobierno de Israel concluyó que atacando civiles, no necesariamente a Hezbollah, el sufrimiento de los libaneses resultaría en la alienación de Hezbollah de la población. El bombardeo produciría una cuña entre Hezbollah y la población libanesa. Exactamente lo opuesto ocurrió. La población libanesa en lugar de culpar a Hezbollah, culpó al estado de Israel y comenzó a apoyar a Hezbollah como un representante legitimó de la resistencia nacional.
Por otro lado, el reportero Norteamericano, Charles Glass, quién fue secuestrado por Hezbollah en los 80s y es un escritor informado sobre el Medio Oriente y Vietnam, en una entrevista con el London Review of Books, indicó que Nasrullah probablemente también pensó desde su punto de vista que los 4,000 misiles disparados por Hezbollah producirían un cisma entre el gobierno y la clase trabajadora de Israel. Pero no pasó. La situación en Israel fue un espejo de lo ocurrido en Líbano. La población de Israel, más que en otras guerras, apoyó al gobierno - 90% de apoyo.
El Segundo asunto son los misiles que cayeron en áreas árabes de Israel. No solo dispararon a judíos israelíes (eso es imposible) y aún eso hubiera estado mal, si no que atacaron árabes israelíes. En la ciudad con más mezcla de Israel, Haifa, los árabes israelíes fueron seriamente atacados. Hubo un éxodo masivo de Haifa. Tras las consecuencias de
Las consecuencias para el resto del mundo árabe son otro asunto. La guerra de Líbano ha tenido un efecto de onda expansiva en todo el Medio Oriente. Originalmente, los señores feudales, semi-feudales y dirigentes capitalistas de Egipto y Arabia Saudita atacaron a Hezbollah por supuestamente haber provocado esta guerra. Esto principalmente debido a que ellos son Sunni y Hezbollah era Chiíta y su base principal aún lo es. Pero esto creó una división entre las clases dominantes en el Medio Oriente y la ‘calle’ del mundo árabe. La abrumadora mayoría de las masas árabes razonaron: ¿Cómo pudo una guerrilla cuyas fuerzas se estiman entre los
Israel y Palestina
En Italia, la extrema izquierda nunca ha tenido una buena opinión acerca de la posición ‘dos pueblos, dos estados’. Primero, porque la posición normal, no solo de la izquierda, sino en general, es que Palestina necesita su propio estado. Hay una gran diferencia entre anti-semitismo y anti-sionismo, y en Italia hay un ataque ideológico contra anti-semitismo, En el movimiento internacional revolucionario y también en
La más importante ley de la dialéctica es que la verdad es concreta. En asuntos históricos, es irrefutable que el trostkismo, comenzando por Trostky mismo, se opuso a un estado judío formado en el territorio de Palestina, Esta fue su posición general en el período entre las dos guerras. Sin embargo el modificó su posición después de que la persecución nazi contra los judíos se volvió evidente. Y una nueva situación había surgido. Trotsky fue siempre flexible cuando hubo que tomar en cuenta nuevos factores. Había un sentimiento de parte de la población judía por salir de Alemania y de Europa y con esto vino un aumento de apoyo al sueño de un nuevo hogar nacional. Bajo el socialismo, razonó Trotsky, si los judíos quisieran un estado, digamos que en una parte de África, con el acuerdo de la población africana, o en América Latina, se podría considerar, pero no en Palestina. Ahí sería una trampa de sangre para los judíos. Es asombroso como sus predicciones se han cumplido. Hubo un artículo en el Financial Times recientemente, sobre el Medio Oriente, en el que un profesor burgués dijo: el lugar más peligroso para un judío actualmente es Israel. Es la trampa de sangre sobre la que Trotsky advirtió. El movimiento trotskista se opuso al establecimiento de un estado separado judío en Israel porque era una cuña contra la revolución árabe. Israel se asentó como resultado de una colonización de tierras árabes, sacando a los palestinos de ahí y usando una mezcla de retórica nacionalista radical y aún socialista dirigida a la población judía que escapo la pesadilla del Holocausto y
Un estado, o una serie de estados pueden desaparecer por medio de la dispersión brutal de personas. Recordemos el desalojo de la población griega de muchas partes de Asia Menor y de los Turcos de Grecia después del colapso del Imperio Otomano. Si regresáramos el tiempo y redibujáramos el mapa, veríamos un gran intercambio de población. El terrible crimen del capitalismo nazi en contra de los judíos de Europa fue usado como justificación del crimen cometido en contra de la población de Palestina.
¿Dos Estados?
Sin embargo, la realidad ahora es que con el curso del tiempo se ha creado una conciencia judía o Israelí. ¿Qué dicen los Marxistas sobre esto? ¿Ignorar la situación real y continuar con la antigua posición? La solución del SU-CI (Secretariado Unificado de
La cuestión que tenemos que preguntarnos es ¿como alcanzar las aspiraciones legítimas de las dos sociedades? En ambas poblaciones existe ahora una conciencia nacional, independientemente de lo que haya sucedido en el pasado. Ese es nuestro punto de partida. Antes de la guerra del Líbano, la idea de que estaban condenados a permanecer dentro de una clase de ‘Gran Israel’ empezó a desarrollarse entre los palestinos. Algunos de ellos dijeron: queremos el voto, lo que atemorizó a la clase dominante. Se preocuparon por la posibilidad de una bomba de tiempo demográfica que cambiaría el carácter del estado de Israel. Por eso Sharon y después Olmert decidieron no mantener la perspectiva del Gran Israel –del Mar Mediterráneo al Mar Muerto, incorporando Gaza – por una simple razón. Si los palestinos continúan prisioneros en ese estado, van a exigir derechos igualitarios: derecho al voto, una persona, un voto, como sucedió en Sudáfrica bajo el apartheid. En un tiempo razonable se convertirían en la población mayoritaria de Israel. Así que el sueño de Likud de un Gran Israel ha sido abandonado y Sharon y Olmert han regresado a la idea de la repartición, que les daría una mayoría judía en el estado de Israel y un estado burgués truncado en lo que se dejará a Palestina. Esto con el consentimiento del régimen de Bush.
Tenemos que enfrentar el hecho de que tanto los judíos como los palestinos han decidido que no pueden vivir juntos en un mismo estado. Esa es su conciencia. ¿Qué opina una Marxista y Trotskista de esa situación? Usted dice que no queremos más estados, que no queremos romper los estados unificados y, abstractamente, eso es verdad. Pero socialistas y Marxistas no pueden obligar a gente diferente a vivir en el mismo estado. Todavía hay una cuestión nacional en los antecedentes de Italia, en Alto Adige. ¿Quien sabe? Esto podría surgir en el futuro. Es como una sombra, que en ciertas circunstancias toma sustancia. ¿Cuál sería nuestra posición? Tenemos que aceptarlo. Es posible que España se separe. Es posible que India se separe. India no es un estado unificado en muchos sentidos. Fue unificado por primera vez por el Imperio Británico, pero ahora está formado por diferentes ‘nacionalidades’. Lenin dijo que no podemos formar una nueva sociedad socialista o comunista en las bases de la menor compulsión en contra de una nacionalidad, grupo o capa de la sociedad. Observa los extremos a los que los Bolcheviques estuvieron dispuestos a llegar para convencer a los oponentes de sus ideas en argumento y ejemplo. Estuvieron aún preparados, después de
Si tuviésemos una alternativa socialista de los dos estados, las masas de Israel podrían acercarse a las de Palestina y discutir con ellos: ‘nosotros tenemos esta solución’ y viceversa. Podría abrirse un diálogo o discusión. Acerquémonos a los trabajadores israelíes con la idea de que ellos serán forzados a incorporarse a un estado común con Palestina en contra de su voluntad y la respuesta será: Pelearemos hasta la muerte, no tenemos ningún otro lado adonde ir’.
Esta no era la situación de Sudáfrica bajo el apartheid. George Galloway, el respetado PM en Londres, ha planteado la idea de que pudiese haber un ‘momento de Klerk’ en Israel. De Klerk representaba a los Afrikaners, pero decidió que el juego se había acabado; los blancos tenían que ceder el poder, o la ilusión del poder a los africanos. Esto solo fue posible debido a los antecedentes del colapso del Estalinismo y también sobre la base del aburguesamiento del Congreso Nacional Africano (CNA). La relación demográfica en Sudáfrica en los años 1990 era de siete negros por un blanco. Está no es la situación en Israel-Palestina en esta etapa. La población de Israel luchará. Aún el ‘campo de paz’ luchará si su derecho a un estado separado esta bajo amenaza. La clase trabajadora de Israel luchará si son amenazados de ser enviados al mar. Por lo tanto demandas transitorias son necesarias para poder acercarse a las masas. Nosotros decimos: Ustedes decidan cuales serán las fronteras de un futuro estado bajo una confederación socialista. Es incluso posible, en las bases de una revolución socialista en el Medio Oriente, que los israelíes y palestinos puedan decidir vivir juntos en un estado con autonomía para ambos. No lo podemos decir de antemano. Pero la dialéctica es que si uno trata e impone un estado sobre ellos, este será rechazado.
Israel es una herida abierta en la región. Una cuestión clave en la revolución del Medio Oriente es como separar a los trabajadores de Israel de la clase dominante. Retándolos, amenazando la idea de una ‘tierra natal’ de Israel, no habrá forma de lograrlo. El estado de Israel es una creación del imperialismo. Pero una industria nativa de armas se ha desarrollado, industrias técnicas, etc. Y ellos pueden tener controlada a la población árabe indefinidamente mientras el capitalismo sobreviva. ¿Qué esperanza tiene la población palestina en esta situación? No hay alternativa sobre la base del capitalismo. La solución de dos estados no es una solución. Resultará en el aborto de un estado. La solución de dos estados socialistas, cuyas fronteras serían definidas por adelantado, democráticamente por la población árabe e israelita, es un arma importante para acercarse a esos trabajadores. Aceptamos que muchos trabajadores árabes, para empezar, tendrán la actitud de que el estado de Israel tiene que ser desmantelado. Es una cuña imperialista en contra de la revolución árabe. Pero una vez que sea bien planteada, puede ser aceptada. Es notable, que antes de la guerra actual, la población Palestina había concluido de mala gana, que la solución de dos estados era la alternativa y que la población de Israel tendría que llegar a la misma conclusión. Pero ahora, significa una frontera nueva, con solo el 10% de
En la cuestión de nacionalidad, como dijo Trotsky, los escritos de Lenin están entre los tesoros de la humanidad. Pero la cuestión de nacionalidad es inmensamente mas complicada hoy en día. Para los marxistas, tiene dos lados. Estamos en oposición al nacionalismo burgués, que busca dividir la clase trabajadora. Apoyamos la máxima unidad de la clase trabajadora a través de las fronteras, continentes y el mundo entero, pero al mismo tiempo nos oponemos a la incorporación por la fuerza de distintas nacionalidades en un estado en contra de su voluntad. Nosotros apoyaríamos, por ejemplo, a la gente de Québec si ellos votaran mayoritariamente en un referéndum por separarse de Canadá. Estamos también a favor de una Escocia socialista independiente. Pero si en Canadá, la burguesía de Québec se negase a aceptar los derechos de las minorías dentro del Québec independiente, nos opondríamos a ello. Algunos de los nacionalistas de Québec están a favor de la independencia de Québec pero en contra de los derechos de los nativos. Nosotros nos oponemos a esto.
0 comentarios to Capítulo 3: El Medio Oriente
Publicar un comentario